Metodología
La herramienta que se plantea tiene como objetivo lograr una gestión más eficiente del presupuesto público, y se basa en una metodología de tres etapas:
ETAPA 1: ¿EN QUÉ SE GASTA?
La primera etapa de la metodología –Program Budgeting Analysis (PBA)– tiene como objetivo saber en qué se gasta. Es decir, sobre la base de la información sobre a qué sectores se destina el presupuesto público, se genera un análisis en el que se determina si ha habido incremento o reducciones reales en el gasto de los sectores a evaluar.
En esta etapa la información proviene del gobierno central y municipalidades, así como de entidades descentralizadas, por lo que también ayuda a corroborar si existe un real interés de parte del aparato estatal en que el gasto público sea transparente y de fácil acceso.
ETAPA 2: ¿EN QUIÉNES SE GASTA?
La segunda etapa – Benefit Incidence Analysis (BIA) – tiene como resultado el saber en quiénes se gasta. El estudio agrupa a los beneficiarios según su nivel de consumo de los recursos públicos acerca de los sectores que el análisis desea evaluar. A partir de esto se puede saber el monto de recursos públicos que recibe cada beneficiario, y si dichos recursos se están distribuyendo de forma equitativa entre la población o si se están asignando a segmentos específicos según sus necesidades.
ETAPA 3: ¡OPTIMICEMOS EL GASTO!
La tercera etapa –Cost Effectiveness Analysis (CEA)– reposa en las dos anteriores y pretende que se logre optimizar el gasto. La idea es que se elabore un análisis que permita identificar si los programas del gobierno han sido efectivos, generando información sobre el costo e impacto de dichos programas.
ETAPA 4: ¡PROPONGAMOS MEJORAS!
En esta cuarta etapa, que se basa en la anterior, se proponen mejoras en la asignación de los recursos públicos para hacer más eficiente los programas sociales del gobierno.